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Calidad de Vida | Nutrición

Nutrición en verano: cuidar lo que comes también es cuidar tu salud

El verano es una época maravillosa: días largos, más tiempo al aire libre, vacaciones, sol… Pero también es una estación que trae consigo cambios en nuestros hábitos alimenticios y necesidades nutricionales, que no siempre son beneficiosos. El calor, las rutinas alteradas, los viajes o la menor disponibilidad de comidas caseras pueden pasar factura a nuestro bienestar si no prestamos atención.

 

Desde Farmacia La Feria, queremos recordarte que una buena alimentación en verano no es solo una cuestión de estética, sino de salud y prevención.

Alimentación ligera, variada y equilibrada

El calor hace que nuestro sistema digestivo funcione de forma diferente. Por eso, es recomendable optar por comidas:

  • Ligeras y de fácil digestión (ensaladas, pescados, frutas, verduras, gazpachos…).
  • Ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes, que ayudan a proteger la piel, la vista y el sistema inmunológico frente al sol.
  • Que incluyan proteínas de calidad y grasas saludables (aceite de oliva, aguacate, frutos secos).
  • Evitando el abuso de fritos, embutidos, dulces o platos ultraprocesados, que muchas veces aumentan en la época de verano por comodidad o viajes.

Hidratación: la base de todo

En verano, la pérdida de líquidos y electrolitos se incrementa por el sudor, especialmente si hacemos deporte, trabajamos al aire libre o estamos expuestos a temperaturas elevadas. Por eso, hidratarse bien es la primera regla para mantenerse saludable.

Algunos consejos básicos:

  • Bebe agua de forma constante, aunque no tengas sed.
  • Complementa con infusiones frías, caldos suaves o bebidas isotónicas si haces actividad física intensa.
  • Incluye en tu dieta frutas ricas en agua como sandía, melón, piña o pepino.
  • Evita los refrescos azucarados o con cafeína en exceso, ya que pueden aumentar la deshidratación.

Aunque todos debemos cuidar nuestra alimentación, hay grupos más vulnerables a los cambios en la dieta y la deshidratación:

Niños y niñas: sus necesidades son distintas, y muchas veces comen peor en verano. Hay que asegurarse de que estén bien hidratados y alimentados con frutas, verduras y proteínas adaptadas.

Personas mayores: con el calor pueden perder el apetito, beber menos agua de la necesaria y tener más riesgo de deshidratación, bajadas de tensión o problemas digestivos.

Personas con enfermedades crónicas: como diabetes, hipertensión o insuficiencia renal. En ellos, una mala alimentación o falta de hidratación puede tener consecuencias importantes.

Personas con tratamientos farmacológicos: ciertos medicamentos pueden alterar la sensación de sed o aumentar el riesgo de deshidratación. Es importante revisar la pauta con el farmacéutico.

¿Cómo podemos ayudarte desde la farmacia?

Desde tu farmacia de confianza te acompañamos también en verano. ¿Cómo?

Asesorándote en suplementación si es necesaria, por ejemplo, en personas mayores o con poco apetito.
Recomendando productos de rehidratación oral, sobre todo en caso de diarreas, vómitos o golpes de calor.
Ayudándote a leer etiquetas y entender qué productos pueden aportar más salud en tus compras veraniegas.
Colaborando en programas de educación nutricional y detectando riesgos a tiempo, como bajadas de tensión o fatiga.
Aconsejando alternativas saludables cuando hay poco tiempo o apetito, como batidos proteicos, barritas equilibradas o snacks saludables.

En resumen:

Cuidarte en verano va mucho más allá del protector solar. Lo que comes y bebes influye directamente en tu energía, tu sistema inmunológico, tu piel y tu bienestar general.

Y recuerda: en Farmacia La Feria estamos para ayudarte, también cuando cambias de ritmo o de estación. Pregúntanos, infórmate y prepárate para vivir el verano con salud y equilibrio.

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