Sin embargo, no todo sobre la radiación solar es positivo: Como es sabido, hay varios tipos de radiación que pueden afectar a nuestra piel de manera diferente, para acabar produciendo cáncer de piel y envejecimiento prematuro. Los signos más visibles de este fotoenvejecimiento extrínseco, el debido a causas externas, son: Arrugas, laxitud, tono amarillento en la piel, tono irregular y ¡cómo no!: las tan temidas manchas. Desgraciadamente, los mecanismos de los que dispone el cuerpo para contrarrestar estos efectos nocivos del sol son insuficientes. Es por eso por lo que necesitamos del uso de los protectores solares.
Como sabemos, los protectores nos protegen frente al cáncer de piel y frente al envejecimiento, pero en los últimos años se ha detectado niveles bajos de vitamina D en la población mundial en general, y se ha creído que una posible causa sería el empleo de fotoprotectores. ¿Y de dónde viene esta suposición? Pues se ha visto que el espectro de acción de la producción de vitamina D se solapa con el del eritema, creando la hipótesis de que sin eritema no hay producción de vitamina D. Y para que haya eritema, la persona debe no estar fotoprotegida.
Podrías pensar que es casualidad… ¿no? ¿Qué te parece?
Actualmente se sabe que nada tiene que ver la relación entre el fotoprotector y los niveles de vitamina D. Sin embargo, hemos consultado varias fuentes bibliográficas, obteniendo resultados muy dispares, ya que la metodología de los estudios es diferente. Desde hace ya 15 años, hay estudios que niegan la relación entre niveles bajos de vitamina D y uso de fotoprotectores. Mientras tanto, es verdad que hay otros donde se afirma que el uso del fotoprotector disminuye la concentración de vitamina D. Sin embargo, en estos estudios no se determina qué tipo de vida llevan las personas evaluadas cuando salen de casa. Es decir, no se ajustaron los resultados en función del tipo de ropa que llevasen los sujetos, ni tampoco se hizo diferenciación entre los que preferían estar a la sombra estando al aire libre, o los que usaban otro método de protección frente al sol, como gorras.
Y además, sorprendentemente, hay otro grupo de estudios que afirman que el uso del fotoprotector aumenta los niveles de vitamina D. ¿Qué te parece?
Como decíamos antes, sin embargo, el grueso de los estudios no ha encontrado ninguna relación entre el uso del protector solar y la producción de vitamina D. Para quien le interese profundizar sobre este tema, en esta revisión bibliográfica pueden encontrar mucha información
Neale RE, Khan SR, Lucas RM, Waterhouse M, Whiteman DC, Olsen CM. The effect of sunscreen on Vitamin D: A Review. British Journal of Dermatology. 2019;181(5):907–15. doi:10.1111/bjd.17980
Desde Farmacia La Feria queremos recordar a todos que las principales fuentes de vitamina D son las de los pescados grasos (como el salmón, el atún, la caballa, etc), el queso, la yema del huevo, etc.